Crédito al consumo

El crédito al consumo es una variante financiera importantísima para el crecimiento económico de una sociedad y el desarrollo de los particulares. Esta modalidad de préstamo cuenta como objetivo los bienes de consumo duraderos y no fácilmente perecederos, como una moto, muebles, electrodomésticos, un coche y otros, que puedan catalogarse como incluidos en esta categoría.

Además, existen unos tipos de préstamos personales, que son como esta variedad de productos al consumo o de consumo. Por regla general mantienen capitales con bajas sumas de dinero y por el contrario sus períodos de devolución son cortos. Por otro lado, es importante remarcar que es una variedad dentro de los préstamos que cuenta con valores medios y su importe no suele ser muy alto, entre tres mil y sesenta mil euros, por esta razón esta variante de préstamo es a corto plazo.

Ventajas de estos préstamos

Por la razón de que en la actualidad el índice de morosidad se incrementa en este tipo de préstamos o créditos al consumo, esta premisa parte del hecho de que su riesgo es muy considerable. Son los bancos los que los conceden siguiendo la reglamentación de la ley española de 1995, de 23 de marzo, de crédito al consumo. Estas variantes de préstamos al consumo son consideradas operaciones con mayor riesgo, en comparación a los demás tipos de préstamos que existen en el mercado y en la sociedad. Son claves para asegurarse una vitalidad económico-financiera para todo aquel que la necesite, para de este modo poder emprender proyectos que satisfagan las expectativas de negocio y beneficio. También son interesantes el crédito fiscal y el crédito universitario.

Características de los prestamos al consumo

Normalmente no requieren del aval o la prenda del bien financiado
Las tasas de interés pueden ser fijas o variables
Pueden requerir algún tipo de garantia personal, como un seguro de vida
Los plazos, intereses, penalizaciones y cargos por devolución anticipada casi siempre se pueden negociar

Cuando se recomienda solicitar un crédito al consumo:

Cuando se tiene previsto hacer una devolución del importe prestado en un corto periodo de tiempo o cuando se necesita liquidez inmediata para financiar una compra. Nuestra recomendación es que en este tipo de créditos el importe de la cuota a devolver no sea superior al 5% del total de los ingresos de la persona o unidad familiar.

Los intereses en este tipo de créditos suelen ser más elevados que en los hipotecarios o en los que el bien comprado actua como garantia del pago, por lo que recomendamos no prolongar más de lo necesario el plazo de devolución.

Nuestra recomendación desde hipocredito es que se mantengan plazos inferiores a los 36 meses y, si se puede, se pacte con el banco una comisión pequeña por cancelación anticipada del prestamo. Así si ahorramos y nos lo queremos quitar de encima lo podremos devolver sin que nos salga por un ojo de la cara.